domingo, 12 de septiembre de 2010

Palomitas Caramelizadas

Estaban en la disyuntiva... de si entrarían o no al cine, ambos querían, aunque quizás no tanto...

Seguramente la realidad era que daba igual el lugar en donde estuvieran, lo importante era pasar un rato juntos.

El humor obscuro y sarcástico de el, curiosamente encajaba con el de ella (aunque este ultimo menos oscuro), y la forma tan original que tenían de charlar, puede ser que sean los factores que los llevasen a comer palomitas casi cada semana, según oía...

Un olor diferente hizo que ella moviera la nariz... Y en un ademán rapidísimo, pidió palomitas con caramelo.
Recibió como respuesta y de forma automática y contundente un NO, a lo que ella tampoco dio tanta importancia, no haciendo mucho alarde al tema, volteo la cara, y siguió como si nada.

Ella seguía esperando en la fila, y el se adelanto a comprar "las municiones"... después de una larga espera y ya con prisa, llego hasta ella y le dijo; "mira, te compre las que querías...".

No pude evitar ver su cara, desencajada, asombrada. Parecía como si nunca antes hubiera habido un detalle así. El acto seguido fue la sonrisa de el, y un beso que supongo el se tenia bien merecido.

Yo seguía observando desde lejos...Los detalles tienen tantas formas...

No es el precio, ni el tamaño, tampoco es la fecha justa, ni la manera de pedir perdón...

Es la sencillez de los actos, la presicion del momento. Lo grande que puede llegar a ser un gesto tan pequeño si lo colocas en el instante adecuado.

Estoy casi segura que ella jamas espero comer sus palomitas con caramelo, así como también creo que eso alegro su noche incluso mas, que la película que pudieran haber visto.

El detalle de todo esta, en que ella nunca pensó que el la hubiese escuchado tanto... Y a mi me queda claro, los hombres escuchan poco, muy poco. Oyen todooo, eso si, y hacen como que responden coherentemente, cuando en realidad solo dan una respuesta que hila de manera convencional la frase que dijimos con anterioridad...pero tampoco me alarmo, es lo normal.

Cuando asienten con la cabeza y dicen "ajaaa", seguro, vamos fijo, que no han escuchado la mitad de lo que hemos dicho. Es por eso que mis frases suelen ser cortas y resumidas. Pensadas y a veces esquemáticamente colocadas en la conversacion...

De ahí que "adoro" cuando alguien escucha lo que realmente dices... no es fácil, pero cuando se consigue, creo que se van adquiriendo puntos, así como en los videojuegos; x100, x1000 etc. hasta que pasas al siguiente nivel...

Saber escuchar, requiere de tiempo, practica, platicas y un cierto crecimiento mental que puede denominarse como madurez... La habilidad se adquiere a través del tiempo, a base de" ensayo y error" y una que otra pelea... pero cuando se logra, si que vale la pena.

La gente espera tanto, condiciona y juzga sin saber en realidad lo que es capaz de dar. Y no es necesario, no hace falta rebuscar entre las piedras, ni tener la mayor de las fortunas. Bastaran cosas tan mínimas para demostrar las intenciones, los sentimientos, las inquietudes.

Es lógico... probablemente ella dijo mil cosas antes y después de esa frase. Pero el escucho lo necesario para hacer de esa una gran noche...cosa que ella valora, supongo.


"...You can buy me diamonds, you can buy me pearls...take me on a cruise around the world...but baby you know I'm worth it..."

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